sábado, 27 de octubre de 2012

414 Geopolítica (Mundial)


Año II – Primera Edición – Editorial: 00000414[1]

 

El Cisne Negro [2]
El Diario Digital de la Historia y de la Geopolítica
Sábado 27 de Octubre de 2.012.





El Nuevo Enigma
De Las Profundidades
Por Rubén Vicente
 

Lo Que Ya Sabemos 

Hace aproximadamente unos diecisiete mil años atrás (léase: 15.000 a.C.), habría existido una civilización antigua, de cultura muy avanzada, políticamente estructurada como una federación de ciudades estado (léase: la anfictionía), extendida desde El Brahma Prutra hasta California, que la historia universal recuerda con el nombre de La Atlántida.

Cuando concluyó la última glaciación corta (9.000 a.C.), el nivel de las aguas de los óceanos se elevó, en promedio, unos dos mil metros (2000). Fue entonces cuando se terminó de inundar La Cuenca del Caribe, dejando a América Central con su configuración actual.  

Al oeste de América Central está El Itmo Centroamericano; en el centro quedó formado El Golfo de México, y al este, quedó configurado El Arco de las Antillas. Al norte de ese arco insular están La Península de La Florida y el archipiélago de Las Grandes Antillas, en cuya área geográfica, se sitúan los piélagos de Las Bermudas y de Las Bahamas, como así también, las grandes islas de Jamaica, de Puerto Rico, de La Española (léase: Haíti y Dominicana) y de Cuba. Todo El Itmo Centroamericano, El Golfo de México, El Caribe y Las Grandes Antillas, habría formado parte del espacio territorial de La Atlántida.  

Luego del inicio de la actual era interglacial (9.000 a.C. a 2012 d.C.), La Atlándida desapareció como entidad política, pero subsistió en las culturas post diluvianas, sobre todo, en las que florecieron al norte de El Itmo Centroamericano, entre las que se destacan las tres que alcanzaron el grado de la civilización, paleontológica, arqueológica, antropológica e historiográficamente más estudiadas (3), que fueron la de los mayas, la de los teotihuacanos y la de los aztecas. 

Las ciudades estado de la anfictionía ante diluviana de La Atlántida, estaban estructuradas a partir de una pirámide, que hacía las veces de observatorio astronómico y meteorológico, como así también, de lugar de culto religioso, con una liturgia basada en los sacrificios humanos. Ups. 

Tanto en La Península de La Florida, como en Las Grandes Antilas, los científicos no han hallado absolutamente ningún vestigio de la existencia de ciudades estado pertenecientes a la anfictionía ante diluviana de La Atlántida.  

Después de La Gran Guerra Mundial (1914-1918), los pilotos militares, de las aeronaves estadounidenses y británicas, que circulaban por el espacio áreo comprendido entre Las Bermudas, Jamaica y Puerto Rico, detectaron interferencias en las señales de radio, de origen en ese entonces desconocido, que obstaculizaban las comunicaciones, denominándose a esa zona de dificil aeronavegación, con el nombre de El Triángulo de las Bermudas, en cuyo centro está Cuba. 
 

Lo Que No Sabíamos 

En el ámbito de La Universidad de Toronto, se conformó un equipo de investigación científica multidisciplinario, liderado por la Dra. Pauline Zalittski (58) que, hace muy pocos días atrás, exhibió los resultados de un trabajo iniciado hace doce años (12). 

Setecientos kilómetros mar adentro de las costas orientales de Cuba, dentro de El Triángulo de Las Bermudas, a cuatro mil metros de profundidad (4000), el sonar infrarrojo detectó la presencia de una pirámide, revestida en un material cristalino, que refleja la luz, haciendo un efecto espejo que, sin embargo, no es observable a simple vista en las actuales profundides. ¿Qué? 

Las observaciones demuestran que, diez kilómetros alrededor de la pirámide, se extiende una inmensa superficie, completamente llana, de arena fina y blanca, de la que sobresalen otras formaciones artificiales, circundantes a la pirámide. ¿Cómo? 

La pirámide tiene base y caras equiláteras y lisas, igual que las pirámides egipcias, que tienen una antigüedad de unos seis mil años (6.000), pero las construcciones circundantes parecen pequeñas pirámides escalonadas, de una forma similar a la de los zigurats sumerios, que tienen una antigüedad de unos siete mil años (7.000),  o a la de las mastabas teotihuacanas, que tienen una antigüedad de unos tres mil años (3.000). ¡Mirá vos! 

La Dra. Zalittski concluye que se trataría de los restos de una ciudad estado de la anfictionía de La Atlántida, pero aclara que si bien la investigación ha dado un primer paso evidente, lo cierto es que recién comienza la segunda fase, teniente a su estudio exahustivo, estimando que la misma insumirá no menos de otros diez años de trabajo (2022). 

Ah, pará…, dejame a mi…, ya lo tengo…. La Dra. Salittsky necesita un buque de superficie para seguir investigando, y por eso, su amigo Singer embargó La Fragata Libertad que está en Ghana, ja ja já. 

¡Gordo, cómo se nota que no se te ocurre ningún otro tema interesante para escribir, eh? 

Y si me dijeran que estoy muy equivocado, respondería que veremos, veremos y pronto lo sabremos.


[1] La libre expresión y la segura circulación de la información contenida en el presente documento se halla jurídicamente garantizada por la Declaración Universal de los Derechos Humanos de 1948 (Art. 19), la Constitución Nacional de la República Argentina de 1995 (Art. 14),  la Ley Nacional N° 26.032 de 2005 y el Código Penal de la Nación (Arts. 153 y 155).
 
[2] Para uno de Los Siete Grandes Sabios de Grecia (Solón) El Cisne Negro es la alegoría de un hecho que es teóricamente posible, pero que todos creen que es prácticamente improbable, pues si ocurriera sería catastrófico.
 

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