El Diario Digital de la Historia y de la Geopolítica
Miércoles 31 de Octubre de 2.012.
El Racismo I
Por Rubén Vicente
El universo nació hace cien mil millones de años
atrás. Hace veinte mil millones de años se formó la vía láctea, incluyendo a
nuestra estrella más cercana (el sol). Hace cinco mil millones de años quedó
conformado nuestro planeta. Y hace sólo mil millones de años surgieron las
primeras formas de vida, fundamentalmente microbióticas, evolucionando hacia
las formas vegetales y animales.
Los géneros
animales fueron evolucionando, primero en los océanos, luego en el aire y
finalmente en la tierra, en la que sólo doscientos millones de años atrás,
reinaban los reptiles gigantes (los saurios).
Fue entonces cuando algo pasó, y sea lo que haya
sido, causó la extinción súbita de la totalidad de los saurios, quedando la
tierra poblada por dos géneros antagónicos, como son el de los pequeños
reptiles y el de los mamíferos, cuya especie más antigua conocida es la de la
tupayas, que son una mezcla de ardillas con ratas, o algo por el estilo.
De las tupayas descienden los tarsios, y de
éstos los lemures, de los que a su vez descienden los omínidos,
que los hay de muchas variedades, grandes, medianos y pequeños. Los omínidos
medianos evolucionaron, hasta generar la especie de los monos, que
también evolucionaron, hasta que algunos de ellos dieron origen a la variedad
de los monos del pleistoceno (léase: los pliopitecus).
Los monos del pleistoceno, es decir, los pliopitecus
son, para nosotros, los más importantes, pues ellos fueron los primeros que nos
pusieron en la vía evolutiva que termina con el hombre actual.
De los pliopitecus, que se calcula que son
humanos al veinticinco por ciento (25%), descienden los pitecántropos (léase:
de pitecantropus), que son cincuenta por ciento humanos (50%). De ellos
descienden los cuasi humanos del Atlántico, justamente llamados con el nombre
de los atlantropus, que son setenta y cinco por ciento humanos (75%). Y de
ellos descienden los hombres hábiles (de homo habilis), que son ciento por
ciento humanos (100%). Right?
No hay duda alguna de que los homo habilis,
que aparecieron en la tierra hace sólo dos millones de años atrás, eran seres
humanos al ciento por ciento (100%); que el yacimiento de sus restos fósiles
más antiguo se sitúa en la isla de Java (Indonesia), y que la totalidad de los
individuos componentes de ese grupo humano (los varones, las mujeres, los niños
y los ancianos) eran de la raza negra.
Esos homo habilis de raza negra de la isla de Java,
también conocidos como Los Hombres de Java, tenían un único modo de relacionamiento
interindividual, que era fuerza bruta, ciega y sanguinaria (léase: la
atrocidad).
Tuvieron que transcurrir, nada más ni nada menos,
que un millón de años más, para que las cambiantes condiciones geológicas y
biológicas dieran lugar al surgimiento de la nueva especie humana de los
hombres de neandethal (léase: de homo neanderthalensis), la totalidad de
cuyos individuos (los varones, las mujeres, los niños y los ancianos), eran
gente de la raza roja, cuya forma típica de relacionamiento fue la
fuerza calculada (léase: las artes marciales = la ferocidad). [3]
Quinientos mil años más de evolución humana hicieron
que surgiera la nueva especie de los hombres de cromagnón (de homo
cromagnensis), la totalidad de cuyo individuos (varones, mujeres, niños y
ancianos) eran de la raza amarilla, siendo su forma típica de
relacionamiento la astucia, que determina su estadío evolutivo de el
salvajismo. [4]
Finalmente, hace sólo cien mil años atrás, sobrevino
el surgimiento de la nueva especie humana de los hombres que piensan (de
homo sapiens), la totalidad de cuyos individuos (varones, mujeres, niños y ancianos)
son de la raza blanca, y cuya forma típica de relacionamiento es la
razón, que es la madre de la civilización. [5]
Las cuatro razas humanas (léase: la negra, la roja, la
amarilla y la blanca) fueron el producto sobreviviente de la evolución
humana, en el contexto de las cuatro fases críticas para el
mantenimiento de la vida microbiótica, vegetal, animal y humana (léase: las
eras glaciales = las razzias = las razas). [6]
Durante la última glaciación corta (15.000 a.C. a
9.000 a.C.), los homo sapiens de la raza blanca civilizada (léase: los
atlantes), fueron sojuzgando o exterminando a los homo habilis de la raza negra
atroz; a los homo neanderthalensis de la raza roja feroz y a los homo
cromagnensis de la raza amarilla salvaje (léase: el genocidio), de modo
tal que, luego la última glaciación corta (Upsala), concluída hace once mil
años atrás (11.000), la totalidad de la humanidad (léase: los varones, las mujeres, los
niños y los ancianos), sin excepción, son todos homo sapiens, de
raza blanca, cuyo modo típico de relacionamiento es la razón que,
repito, es la madre de la civilización.
Eso no significa, para nada, que no existan
variedades de hombres más o menos blancos, que conservan la fisonomía de
sus razas ancestrales (léase: los africanos negros, los americanos rojos o los
asiáticos amarillos), pero está cristalinamente claro que todos son homo
sapiens pertenecen a la misma raza más o menos blanca, que basan sus
culturas en la razón, que repito otra vez más, es la madre de la
civilización. Right?
En otras palabras, el concepto de la raza no tiene nada que ver con el color de la piel, sino más bien, con la idea de la supervivencia post eras glaciales
(léase: las razzias = la raza), y con la forma típica de relacionamiento
interindivudual humano, más allá de las apariencias corporales externas,
determinadas por las condiciones climáticas de cada lugar, bajo la forma de más
o menos melanina, y de que los seres humanos, sin excepción,
conservemos en nuestra memoria genética, rasgos típicos de la atrocidad,
de la ferocidad y del salvajismo, propias de las razas extintas.
Y lo que caracteriza la civilización humana, basada
en la razón, que es propia de la raza blanca de los homo sapiens,
sobreviviente de la glaciación de Upsala, son la piedad, los calendarios, los
sistemas de pesas y medidas, la arquitectura, el comercio, la ley y la moneda,
claro está.
Por todo lo expuesto, no existen razas
superiores a otras, por la sencilla razón, de que la totalidad de los
individuos que actualmente pueblan el planeta tierra (los varones, las mujeres,
los niños y los ancianos) pertenecen a una sola y única raza, que es la
que sobrevió a la última era glacial, que el la raza humana, y nada más, claro está. Is it enoughtly clear?
Por eso, la humanidad, más o menos blanca y
civilizada, puede ser válidamente dividida en dos clases de individuos (2), que son los
seres humanos típicos (léase: los seres racionales = los civilizados), es
decir, las personas, y los seres humanos átipicos (léase: los seres
atroces, feroces o salvajes = los incivilizados), es decir, las bestias,
que jurídicamente, son genéricamente son tipificados como los criminales.
Y como todo crimen es la relación lógica, de
carácter binaria, entre un delito antecedente y una pena consecuente,
habrá que ver qué dice la ley que debe hacerse con las bestias criminales,
es decir, qué penas deben corresponderle a sus delitos.
Y si me dijeran que estoy muy equivocado,
respondería que veremos, veremos y pronto lo
sabremos.
[1]
La libre expresión y la segura circulación de la información contenida en
el presente documento se halla jurídicamente garantizada por la Declaración
Universal de los Derechos Humanos de 1948 (Art. 19), la Constitución Nacional
de la República Argentina de 1995 (Art. 14),
la Ley Nacional N° 26.032 de 2005 y el Código Penal de la Nación (Arts.
153 y 155).
[2] Para uno de Los Siete Grandes Sabios de
Grecia (Solón) El Cisne Negro es la
alegoría de un hecho que es teóricamente posible, pero que todos creen que es
prácticamente improbable, pues si ocurriera sería catastrófico.
[3]
Neanderthal es la localidad alemana en la que se halla situado el yacimiento
fósil más antiguo de esa segunda especie humana.
[4]
Cromagnon no es un boliche, sino la ciudad francesa donde se halló el
yacimiento fósil más antiguo de la raza salvaje.
[5]
Las comunidades humnas que viven en el estadío antropológico evolutivo del
salvajismo, alcanzan la civilización cuando inventan, cultivan y emplean la
piedad, los calendarios, la arquitectura monumental, la moneda mercancía, los
sistemas de pesas y medidas, el comercio, la organización política propia del
estado y la la ley. Conste.
[6] La
geología tiene estudiadas cuatro eras glaciales (4), de cincuenta mil años cada una (50.000 c/u), separadas por períodos interglaciales, de cuatrocientos
cincuenta mil años cada uno (450.000
c/u). Pero en cada era interglacial,
se verifican glaciaciones cortas, de no más de cinco mil años de
duración (5.000 c/u). La última era
glacial concluyó treinta y cinco mil años antes de nuestra era (35.000 a.C.), pero entre el 15.000 y el
10.000 a.C., hubo una glaciación corta, que la historia recuerda con el nombre
de El Diluvio Univeral. Conste.