domingo, 9 de junio de 2013

603 Geopolítica (Argentina)


Año II – Primera Edición – Editorial: 00000603 [1]

El Cisne Negro [2]
El Diario Digital de la Historia y de la Geopolítica
Domingo 9 de Junio de 2.013.




Dinamarca Un Poroto
Por Rubén Vicente 

Ponele que vos nacistes y que te criastes en un hogar de la clase media baja (léase: la pequeña burguesía) de Rio Gallegos, allá por los sesenta, y que hicistes la primaria, el secundario, y que empezás a trabajar de cajero en la casa central del Banco de la Provincia de Santa Cruz. ¿A qué podés aspirar?  

Bueno, primero que nada, a ganar un sueldo modestamente decente, para que empieces a dejar se ser una carga para el presupuesto de tu familia. Después, si tenés la suerte de que te dejen hacer horas extras, darte algunos gustos sencillos, como comprarte pilchas, tener tus francos higiénicos en el barrio de las casitas, juntar para comprarte un autito usado, o incluso, si soy un pibe onda conserva, empezar a juntar para casarte, mientras vas haciendo la colimba y te buscás una buena novia. ¿Y con el tiempo? 

Y con el tiempo, digamos, a los veinticinco, podés aspirar que los ascensos que vayas teniendo en la jerarquía administrativa del banco, te hagan merecedor a que te otorguen un préstamo hipotecario, para tener tu terrenito y edificar tu casita, para vos, tu mujer y tus hijos; cambiar el auto cada cinco años; o irte de vacaciones con la flia, por la obra social de la bancaria, a Barioche, a Buenos Aires o a Las Cataratas; pagarle los estudios a los chicos; y para de contar. ¿Y a los veinte años de trabajo? 

Bueno, para ese entonces, ya rondando los cuarenta, si llegastes a gerente de alguna sucursal, por ahí, hasta saldás el crédito y se hacen algunos viajes largos, a Camboriú, a Punta Cana, a Nueva York o París, qué sabés, a lo mejor? 

O podés hacerte un capitalito, e invertirlo en la compra de un local, para alquilarlo y sacar una renta, para sumar a la jubilación cuando te retires, para tener una vejez cómoda, y hasta podés terminar tu carrera teniendo una terrible todo terreno, o un flor de checonato bien pintón, pero para de contar, porque un gerente de banco estatal del culis mundis no es Rockefeller, vos sabés.  

Salvo que vos seas un fuera de serie, y que llegues a gerente general, a director, a síndico, a vice o a presidente de ese banco que, al fin y al cabo, es provincial, y que con semejante ingreso mensual, vos te termines comprando una chacra, y te conviertas en un microproductor rural patagónico, porque esa tierra da para tener ovejas y punto. 

Ahora, si vos empezastes de cajero, y terminás siendo un bruto terrateniente de rango panlatinoamericano, onda el gran chaparral, que más de un par brasileño o canadiese te envidiaría, y encima, tenés pozos petroleros tipo JR Iwing, y tenés financieras Bernard Madoff style en Puerto Madero, sería para pregutarte cómo hicistes la guita, porque no te creeria nadie, si decis que la hicistes por derecha, obvio. 

Digo, cómo pretende el causante decir que es un hombre honrado; que nada tiene que esconder; que jamás cometió ningún delito; que ni sabe el fangote de guita que tiene, y sale a decir que pasen y vean; y a la semana, se ven por la tele pibes encapuchados de noche, cargando bolsas de la casa del finado, en furgonetas de la empresa de su propiedad? 

Y por favor, que no me vengan con que los allanamientos dieron negativos, porque la héctaria no tiene rueditas, y ahí están todas a la vista de todos, y sólo basta contarlas, para darse cuenta de que no podés fiera. 

Primero, no se puede ser tan cara dura, y no se puede ver semejante corrupción y quedarse de brazos cruzados, o peor aún, salir a taparla para poder siguir en el poder a como de lugar, porque entonces, lo tuyo no es una revolución un catso, y vos lo sabés.  

Tenés que irte allá, y parar la moto un par de semanas tranquila, mirando el glaciar, para ver qué hacés con este coso, porque esa mancha, es la que va a hacer que todos y todas las que confián en vos, directamente, digan que pase el que sigue, y a la mierda con el puto kircherismo. Total … 

Yo me doy cuenta que algo debés estar haciendo, porque lo veo a Lage, que le pega, y le pega, y le pega, aunque el canal sea de Cristobal, que parece que está empezándote a fabricar el enano de sacrificio que vos necesitás para seguir, porque con Jaime mejor no meterse, claro, y con Boudou, ni hablemos. ¿Nocierto? 

Pero te cuento que la CIA te la tiene jurada, y vás a tener que liquidar a todos los de la banda para que pare, o van a ir directamente por vos, y sin contemplaciones, y por más que lo mates a El Gordo Lanata, o que lo destruyas a Clarín; no vas a zafar. 

Ahora tenés al consejo de la magistratura a tu favor para que te salve, pero la CIA siempre juega al yenga por zurda, y busca la maderita de apoyo, y busca la maderita de apoyo, y busca la maderita de apoyo, con la paciencia de un chino, pero al final, la encuentra, y cuando la encuentra, sencillamente, te saca la maderita, y vos sabés lo que pasa. 

Si lo hicieron con Ben Laden, que era un recontra petrojeque árabe, sobrino del rey, qué es, te pregunto, lo que no van a hacer con vos, que sos la hija del colectivero, date cuenta, por Dios. 

Si sabés que la suerte de los osados siempre es poca, por qué te jugás tan mal con ese cajero del banco del fin del mundo, si podés ordenarle al chango que lo vacíen, que lo manden al calabozo con los bolsillos dados vuelta, ganar la relección, y seguir haciendo la revolución louis vuittoniana lo más pancha. 

Animate, que la negrada te lo va a valorar, y los blancos de la segunda república perdida también, y vas a ver que hasta el gran negro gran, le va a decir a la agencia paren, aborten, pero en inglés, obvio. 

Digo, sacate al enano de encima cuanto antes, o te crucifican a vos Cris, por favor. 

Por eso le digo a Hamlet que Dinamarca un poroto. ¿Verdad? 

Y si me dijeran que estoy muy equivocado, respondería que veremos, veremos y pronto lo sabremos.


[1] La libre expresión y la segura circulación de la información contenida en el presente documento se halla jurídicamente garantizada por la Declaración Universal de los Derechos Humanos de 1948 (Art. 19), la Constitución Nacional de la República Argentina de 1995 (Art. 14),  la Ley Nacional N° 26.032 de 2005 y el Código Penal de la Nación (Arts. 153 y 155).
 
[2] Para uno de Los Siete Grandes Sabios de Grecia (Solón) El Cisne Negro es un hecho teóricamente posible que todos creen que es prácticamente improbable, pues si ocurriera sería castastrófico.
 

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