martes, 30 de julio de 2013

652 Geopolítica (Argentina)

Año II – Primera Edición – Editorial: 0000652 [1]

 
El Cisne Negro [2]
El Diario Digital de la Historia y de la Geopolítica
Martes 30 de Julio de 2.013.



Las Minas Explotan
Por Rubén Vicente 

Desde el final de la última glaciación corta (15.000 a.C.), algunos individuos tuvieron la genial idea de empezar a sacar barro del pantano, para dejarlo que se secara al sol, y después cortarlo en panes, inventando el ladrillo, que en inglés, se dice brick. Right? 

Los talleres artesanales del ladrillo fueron la base de la arquitectura, en todo El Cercano Oriente, desde El Indo hasta Gibraltar, pero más o menos desde el 7.000 a.C., a los fabricantes de ladrillos de la villa indostaní noroccidental de Mohen Jodaro, se les ocurrió otra idea genial, empezando a elaborar los ladrillos en arcilla, pero agregándoles arena y cal, y procediendo a su secado, pero no ya al aire libre, sino a fuego, producido por hornos de barro, inventando entonces el ladrillo cerámico. 

Y para el 4.500 a.C., a los arquitectos egipcios se les ocurrió la idea de revestir los ladrillos cerámicos con pinturas vegetales, diseñando imágenes, que quedaban impresas en los ladrillos por secado a horno, dejando inventados los ladrillos esmaltados. 

Todas las grandes civilizaciones antiguas basaron su arquitectura en el empleo masivo del ladrillo cerámico, que se siguió frabicando artesanalmente durante toda la edad media, hasta que durante la segunda mitad del siglo dieciocho, la revolución industrial británica hizo posible que esa fabricación se hiciera, justamente, a nivel industrial, siendo los ladrillos cerámicos el reemplazo progresivo de la madera y de la piedra, sirviendo para hacer casas y edificios de todos tipo, en todo el mundo.  

Sin embargo, lo cierto es que el noventa por ciento de los todo tipo de ladrillos cerámicos, habidos y por haber (90%), son fabricados a base de materiales que contienen silicatos, siendo el sílicio un material de importancia crítica para la industria global de la construción. Right? 

Pero cuidado, que el silicio también se emplea como material en la construcción de las planta nucleares. Por eso, la seguridad nuclear de toda nación que sea o que pretenda ser atómica, descanza en los ladrillos cerámicos de los hornos de uranio, es decir, de los reactores nucleares, que deben ser de silicio, pero de la mejor industria minera y de la construcción, claro está. 

Y la verdad es que uno de los gigantes mundiales de la industria de la construcción de hornos de uranio (léase: los reactores nucleares) es la firma Bricks Corporation NV de Nueva York, matriz del Bricks Group de los EEUU, que por supuesto, tiene una división latinoamericana, con domicilio en la ciudad brasileña de San Pablo (Estado de San Pablo). 

De esa filial latinoamericana dependen las filiales nacionales de toda la región, incluyendo la brasileña y la argentina, obvio. Y es justamente en la filial argentina de Bricks a donde trabaja el Ing. Marcelo Ricardo Hojman (48), que el pasado miércoles dieciesite de julio a la mañana, se supone que estaba de visita en la casa de sus padres en la ciudad de Coronda, cabecera del departamento municipal del mismo nombre, perteneciente a la provincia argentina de Santa Fé y que, antes de salir para Buenos Aires, llamó a su mujer de hecho, Dña. Marisa Zarate (39), para decirle que iniciaba el regreso en automóvil a su hogar. 

Es un viaje de no más de ocho horas (8), y por ende, a la noche, ya tenía que estar, pero no, porque ya era medianoche, y nada. La mujer no recibió ningún llamado por celular, y fracasó en todos sus llamados al hombre, pareciendo que se lo había tragado la tierra, o algo por el estilo. 

Por eso, el jueves a la mañana, los padres del Ing. Hojman interpusieron una denuncia policial, de averiguación de paradero ante la policía santafecina, que comenzó la búsqueda rastreándolo en las imágenes de las cámaras de video de los peajes de las autopistas de salida de Coronda.  

En la noche del miércoles, los radiogramas policiales ya altertaban de la búsqueda del Ing. Hojman en todo el territorio nacional de La Argentina, suponiendo el juzgado criminal y correccional federal interviniente, que podías tratarse de un secuestro extorsivo, o algo por el estilo. 

Paralelamente, la noticia llegaba a los medios masivos de comunicación social, tanto nacionales como se ve que internacionales, por los menos, en la subregión latinoamericana de El Cono Sur (léase: Uruguay, Paraguay, Bolivia, Chile y Brasil), entrando a tallar en la búsqueda del desaparecido el servicio de inteligencia privado de El Grupo Bricks, es decir, la firma Universal Control de los EEUU, que como es sabido, tiene aceitados contactos con todos los servicios de inteligencia norteamericanos, empezando por La CIA, obvio. 

Para la mañana del viernes dieciocho, la mujer del Ing. Hojman declaraba ante los medios que ella creía que al marido lo tenía guardado la policía entrerriana (léase: el secuestro de estado), enterándose ella de la versión de que “ … se lo llevaron al Brasil” (sic). 

En la noche del sábado, el consulado argentino en Florianopolis (Estado de Santa Catarina), luego de comunicarse vía cancillería con la familia, emitió un comunicado de prensa, informando a la opinión pública mundial que el Ing. Hojman había aparecido vivo, sano, salvo e ileso, debiendo permanecer en esa ciudad del sur del Brasil, para declarar ante uno de los juzgados en lo criminal y correccional federales locales, que evidentemente, considera que existe mérito suficiente, como para abrir una causa, no se sabe bajo qué cargo, ni tampoco, en qué carácter debe prestar declaración el Ing. Hojman. 

Y las redes sociales se empezaron a llenar de indicios, leves, imprecisos y discordantes (léase: la sospecha), de que El Ingeniero Hojman, directamente, se había fabricado una historieta, para encubrir que estaba en Florianopolis con una mina (sic). Ja ja já¡ 

Pero en la mañana del domingo veinte, la esposa cambió la versión mediática, diciendo que había ido a cobrar una cuentas pendientes con unos clientes (sic). 

Mientras tanto, el juzgado santafecino quería saber cómo era posible que Hojman haya cruzado la frontera y que llegara a Florianópolis, sin que lo supieran la gendarmería nacional, la prefectura naval argentina, o la policía nacional aeroportuaria. 

Ya sé que estoy absolutamente chapa, pero mi corazonada es que, en realidad, Hojman se apellida Hofmann; que es un agente secreto de Odessa; y que está involucrado en una operación ultra secreta, de contrabando de materiales de uso dual, para El Programa Nuclear Iraní (PNI), con la colaboración de La Side y de La Abin, o algo por el estilo, porque las brujas no existen, pero que las hay, las hay, y no siempre planifican del todo bien sus operaciones. ¿Qué querés que te diga? 

Y por eso digo que hay que cuidarse, porque por más que vos creas que tenés todo bajo control, igual las minas explotan. ¿Verdad? 

Y si me dijeran que estoy muy equivocado, respondería que veremos, veremos y pronto lo sabremos.


[1] La libre expresión y la segura circulación de la información contenida en el presente documento se halla jurídicamente garantizada por la Declaración Universal de los Derechos Humanos de 1948 (Art. 19), la Constitución Nacional de la República Argentina de 1995 (Art. 14),  la Ley Nacional N° 26.032 de 2005 y el Código Penal de la Nación (Arts. 153 y 155).
 
[2] Para uno de Los Siete Grandes Sabios de Grecia (Solón) El Cisne Negro es un hecho teóricamente posible que todos creen que es prácticamente improbable, pues si ocurriera sería castastrófico.
 

No hay comentarios:

Publicar un comentario