El Diario Digital de la Historia y de la Geopolítica
Sábado 24 de Noviembre de 2.012.
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Las Hawaianas
Por Rubén Vicente
De joven yo era muy
dormilón, pero después que cumplí cincuenta, se ve que me agarró el viejazo,
porque ahora que tengo cincuenta y seis, no puedo estar en la cama si veo que ya
amaneció; no como Ema (40), que en los fines de semana se da cuenta que es de
día después del mediodía, cómo la envidio, ja ja já.
Y me gusta bañarme,
afeitarme, vestirme, desayunar e informarme, antes de comenzar a despuntar mi
hobbie matutino de leer y escribir. Son sólo unos minutos en la cocina, me me sirven
para tomar contacto con el universo a través de la radio, siendo mis
predilectas El Mundo, Mitre y Colonia, que no son peronistas, pero que, en mi
opinión, tienen los mejores periodistas (Lanata, Castro, Wende, Chiarutini, Brandimarte,
Guardado, Muchnik, Kohan, Llamas, etc). También me flagelo con Continental y
Radio 10, porque me gusta la diversidad ideológica, y el estilo de tipos como
Hanglin o Fantino.
Uno de mis placeres
radiales es escuchar los programas matutinos del finde de El Mundo, vinculados
con la temática de la economía rural. El campo me resulta un planeta tan
desconocido como fascinante. Ni en broma me gustaría cultivar ese estilo de
vida, porque nací y moriré siendo un bicho suburbano que ahora es ultra urbano,
aunque uno de los lemas en los que creo es nunca digas nunca.
Ni sé como se llama el
programa, ni quién lo conduce, pero hoy me tilde con la historia personal de Miguel Crones, un
tipo que ya es abuelo de un varón de seis años. Nació y se crió pobremente en
Entre Ríos. Desde chico empezó a aprender a obtener la miel de esa tierra
bendita.
Y de joven, siendo ya
un experto trabajador de la apicultura, se le hizo el click, y se le dio por
emigrar al Canadá, radicándose en Vancourver que, de clima cálidado, cero,
obvio.
Ahí le enseñaron el
arte específico de criar reinas y, con ese bagaje, se animó a establecerse en
Hawai, donde se juntó con un mexicano y se convirtió en el principal
accionista, presidente del directorio y gerente general (The Chieff Executive
Officer = The CEO), de una nueva sociedad comercial, que comenzó a girar bajo
la razón social de Hawai and Queens
Ltd., con domicilio legal en la ciudad de Honolulu.
Empezaron comprando y
vendiendo miel. Después se compraron un campo, contrataron peones y armaron un
colmenar que, diez años más tarde, exportaba al mundo entero (orbis).
Mientras tanto, se
metieron en el mercado ultra reducido a criar y vender reinas, y hace cinco
años, dan cursos de formación en esa materia selectiva, llenándose de guita,
pero también, forjando una elite productiva, de la que forman parte hombres y
mujeres de los cinco continentes (Oceanía, Asia, Africa, Europa y América).
Están vendiendo decenas
de miles de toneladas miel por año, a cuatro dólares el kilo, porque de eso
viven, pero para que te des una idea de cómo le va a este ilustre
desconocido, te cuento que el departamento de agricultura de los EEUU lo
acaba de convocar para que lidere un equipo de investigación, armado para
descubrir las causas de un fenómeno que ha sido llamado con el nombre de El
Colapso de las Colmenas, que está arruinando la apicultura en treinta y
cinco estados de la unión (35). ¿Qué
tull el entrerriano, eh? ¡Vamos todavía la Argentina!
Y ahí apagué la radio,
porque quería ver que están informando las agencias globales sobre lo que está
ocurriendo en el mundo, en la región y en el país, pero me quedé tildado con Miguel
Crones, y me puse a pensar.
Los EEUU están bien
jodidos con esto del colapso de las colmenas. El Brasil pinta como uno de los
potenciales nuevos grandes productores y exportadores de miel. Pero nada que
ver con La Argentina, que ya lo es desde hace varias décadas. ¿Y quién es el
que más le compra a La Argentina?
Repuesta: Así como el
principal comprador mundial de caballos de polo de La Argentina es Brunei, el
principal comprador de miel es Irán. Ups.
La Argentina mantiene
relaciones económicas, diplomáticas y militares, es decir, relaciones
geopolíticas con El Imperio Persa desde la época de Mitre, pero simpre
transitaron por el andarivel de las formalidades (léase: light), hasta que en
1913, La Anglo Persian Oil, a través de su subsidiaria vernácula (La Puma),
obtuvo la concesión de exploración y de explotación de yacimientos
hidrocarburíferos en Salta.
Desde la época de
Perón, La Argentina le empezó a vender miel a Irán, y en 1964, nada menos que su
magestad, el monarca de El Imperio Iraní (léase: La Pequeña Persia), Mcl. RIA ®
Dr. Dn. Muhammad Reza I Patlevy Aryamehr (a) El Shah (45), visitó oficialmente
nuestro país, siendo obviamente recibido en La Casa Rosada por su excelencia,
el señor presidente francmasón-radical del pueblo de la nación, Dr. Dn. Arturo
Humberto Ilia (a) La Tortuga (64).
Ah, ya sé, hablaron de
petróleo. Respuesta de la bonaerense: negativo. El Shah le explicó a La Tortuga
que acaba de lanzar El Plan Nuclear Iraní (PNI), con el propósito de producir
electricidad y radioisótopos de uso médico y agronómico (léase: los fines
pacíficos), hallándose en trámite la membresía persa en La Asociación
Internacional de la Energia Atómica (AIEA), dependiente de El Consejo Económico
y Social (ECOSOC) de La Organización de las Naciones Unidas (ONU), liderada por
los EEUU y secundada por La Unión Soviética, Gran Bretaña, Francia y China.
El Shah se tuvo que
tomar el te de peperina que le convidó La Turtuga, para que siguiera escuchando
el pedido que tenía que formularle, y era que él quería que los primeros
científicos e ingenieros nucleares iraníes, no se formaran en los EEUU, sino
más bien, en La Argentina y, más precisamente, en La Comisión Nacional de
Energía Atomica (CNEA). ¡Ah mirá vos!
Desde entonces (1964),
fuera por derecha o por izquierda, la cooperación nuclear argentino-iraní fue contínua
y permanente, renovándose hace sólo un año, cuando Cristina anduvo con su
hija por Turquía, Kuwait y Qatar. Y fue en Qatar donde Timmerman se quedó unos
días más, negociando con los cataríes las bases de la futura cooperación
nuclear bilateral.
Lo que nadie dijo en
ese momento fueron tres cosas (3).
La primera es que la casa real del emirato árabe es la accionista
minoritaria (49%) de la filial local
de La Red Al Jazira (léase: La CNN del Mundo Musulmán). La segunda es
que esa red musulmana es la única que pasa los videos clandestinos de Al Qeada.
Y la tercera es que el estado catarí es dueño de una empresa que tenía
oficinas en el piso ochenta y seis de la torre uno de Las Torres Gemelas de
Nueva York, es decir, de la firma The World Trade Center Corporation NV, matriz
del WTC Group de los EEUU. ¿Cómo?
Si, como lo eschuchás.
La misma empresa que pasa los videos terroristas era la dueña de la empresa
directamente impactada por los aviones terroristas del 11-S. Y ya sabemos que
Qatar es el único estado de El Golfo Pérsico que tiene relaciones
bilaterales oficiales con Irán, no sé si… ¡Qué raro¡ ¿Acá no habrá gato
encerrado? ¿No será que Qatar es el puente para la cooperación nuclear
subrepcia de La Argentina con Irán?
¡Callate querés? ¿Qué
lengua biperina que tenés gordo, eh! ¡Vos siempre con las teorías
conspirativas¡ ¡Me tenés prodrido¡
Okey, pero fijate que,
mucho más interesante que Farinelo o que El Gordo D´Elía, puede ser para La
Side, o incluso para La CIA, un tipo como Miguel Crones, que puede
hablar con Irán en nombre y por cuenta de La Argentina o de los EEUU, lo mismo
da, de miel, obvio, pero tambíen, de los temas de agenda que le manden
abordar, porque el entrerriano es un trabajador, denvenido el productor,
devenido en maestro mundial de apicultura, devenido en consultor del gobierno
de la hiperpotencia global, en un tema que puede estar estrechamente vinculado
con la guerra bacteriológica, a partir del virus que está provocando El
Colapso de las Colmenas ... ¿Me vas siguiendo?
Y Miguel Crones no sólo
tiene el bajo perfil que se requiere para estás misiones especiales (léase: la
cobertura = la pantalla), sino también, vive, trabaja y opera de una base casi
fantasma para el mundo (léase: Hawai). Wonderfull!
Ah, ahora me está
captando la idea, y te empieza a gustar. ¿Verdad?
Si, si, dejame a mi. De
nombre supuesto podríamos ponerle La Abeja Reina y de nombre de guerra
podríamos ponerle La Ojota, digo, por las hawaianas. ¿Te gusta? ¿Está bueno? Ja ja já.
Y si me dijeran que
estoy muy equivocado, respondería que veremos, veremos y pronto lo sabremos.
[1]
La libre expresión y la segura circulación de la información contenida en
el presente documento se halla jurídicamente garantizada por la Declaración
Universal de los Derechos Humanos de 1948 (Art. 19), la Constitución Nacional
de la República Argentina de 1995 (Art. 14),
la Ley Nacional N° 26.032 de 2005 y el Código Penal de la Nación (Arts.
153 y 155).
[2] Para uno de Los Siete Grandes Sabios de
Grecia (Solón) El Cisne Negro es la
alegoría de un hecho que es teóricamente posible, pero que todos creen que es
prácticamente improbable, pues si ocurriera sería catastrófico.
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