El Cisne
Negro [2]
El
Diario Digital de la Historia y de la Geopolítica
Viernes
29 de Marzo de 2.013.
The Old Man and The Young Girl
Por Rubén Vicente
Ema
dice que a ella no le pesan los dieciseis años que diferencian su adultez de mi
madurez. En la intimidad de hogar, yo la trato de hijita, y ella me trata de
dotor, ja ja já.
Nos
conocimos hace ya dos años, cuando yo tenía cincuenta y cuatro, y ella tan sólo
treinta y ocho. Desde entonces, la hijita y el dotor vivimos muchas cosas
juntos, de las excelentes, y hasta de las trágicas, y en el medio, todas las
más o menos buenas y las más o menos malas que vos te puedas imaginar, pero si
te metés a examinar nuestro balance, te va a dar ultra positivo, con pronóstico
de estabilidad y felicidad.
Y
si, porque yo tengo las cosas lógicas de mi edad, pero hago lo que puedo para
que, cuando está mal, hacerla sentir menos mal, y cuando está bien, hacerla
sentir lo mejor posible, y ella, que también tiene las cosas lógicas de su
edad, te puedo asegurar que lo mismo.
Es
que construir una pareja conviviente, noche a noche y día a día, exige cultivar,
sucesivamente, lo que decía Erick Fromm, que es el nivel inferior del conocimiento
del otro, porque eso te permite llegar al nivel intermedio del respeto por el
otro, que te conduce al tercer nivel superior de la admiración del otro, que
son los tres factores desencadenantes de esa actitud resultante, que se llama con
el nombre de el amor.
Si,
el amor, que nada tiene que ver con la calentura, que en nuestro caso, te puedo
asegurar que sobra, porque parecemos conejos, no sé si …
No,
el amor es muchísimo más que la calentura. El amor es una actitud de
vida, hacia uno mismo y hacia los demás, incluyendo obviamente, a tu mujer, o a
tu hombre, y para no plantear una irritante discriminación, digamos a tu
pareja, quien quiera que ella sea.
Ema
sabe que, como buen escorpiano, soy terriblemente contradictorio, caprichoso, autoritario
y arbitrario, pero en su presencia, es como si me dieran dos cajas enteras de alplax,
convirtiéndome en algo así como en un monje budista, sereno como agua de
tanque, pero intenso como un volcán.
Por
eso digo que Ema es mi colita rutera, que evita que haya cortocircuitos en mi
instalación, haciendo que la energía fluya armoniosamente en mi.
Y
yo sé que ella, como buena ariana, es más que ansiosa, en absolutamente todo,
con todo y para todo, queriéndolo todo para antes de ayer, pero ante mi, yo
siento que es como que se calma, que se seda, y que su alma reposa, organizando
su casi infinita energía vital, pero direccionándola justamente hacia donde
ella quiere.
Yo
digo que ella es mi redención, y ella dice que yo soy su familia. No hubo, ni
creo que habrá, grandes problemas entre nosotros, y si los hubiera, estoy
convencido que los resolveríamos de modo civilizado, porque ni ella ni yo,
somos seres dipuestos a dañar, a perjudicar o a agraviar, a nadie y por ningún
motivo, y menos entre nosotros dos, siempre que nos jodan mal, off course, pues
no somos unos indefensos corderitos, porque tampoco la pavada, obvio.
Pero
la onda es que yo la ponga bien, y que ella me ponga bien a mi, porque si
estamos bien los dos, invididualmente y en pareja, nuestra energía refluirá
extramuros, haciéndole bien a los demás, siendo nuestra felicidad, nada más ni
nada menos, que un aporte a nosotros mismos, al prójimo, y a la comunidad en su
conjunto, claro está.
Por
eso, les pido a todos y a todas, tengan la edad que tengan, que cultiven la
actitud del amor, sobre todo con su pareja, que es la base para tener una
buena familia, que es la base para tener una buena sociedad civil, que es la base
para tener una buena nación, como tanto nos hace falta, y como tanto merecemos
los argentinos y la argentinas.
Pero
hay algo que quiero decirles a todas las mujeres, y es que mi consejo, es que
sean tan calentonas y tan ansiosas como lo sientan y como lo quieran, pero
búsquense alguién que las contenga, como las contenía su papá, cuando ustedes
eran chiquitas y lloraban desconzoladamente porque se les había perdido la
muñeca.
Hallarán
la paz espiritual, que estoy convencido que alcanzó Ema a mi lado, y a partir
de esa nueva realidad, todo en ustedes irá cada vez mejor. Y llegará el día en
que se mirarán al espejo, y dirán para ustedes mismas, soy una gran mujer, como
es Ema.
Si,
como es Ema, a la que hoy le quiero decir: ¡Feliz Cumpleños Hijita!
Y
si me dijeran que estoy muy equivocado, respondería que veremos, veremos y pronto lo
sabremos.
[1] La libre
expresión y la segura circulación de la información contenida en el presente
documento se halla jurídicamente garantizada por la Declaración Universal de
los Derechos Humanos de 1948 (Art. 19), la Constitución Nacional de la
República Argentina de 1995 (Art. 14),
la Ley Nacional N° 26.032 de 2005 y el Código Penal de la Nación (Arts.
153 y 155).
[2] Para uno de Los Siete Grandes Sabios de Grecia
(Solón) El Cisne Negro es un hecho
teóricamente posible que todos creen que es prácticamente improbable, pues si
ocurriera sería castastrófico.
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