El Diario Digital de la Historia y de la Geopolítica
Jueves 15 de Agosto de 2.013.
La Guerra Por La Supervivencia V
Por Rubén Vicente
En 1956, el titular de El Estudio Jurídico Menem y
Asociados, de la ciudad de La Rioja, capital de la provincia argentina de La
Rioja, Lic. Dn. Carlos Saúl Menem Akil (a) Carlos Menem (a) Carlitos (a) El
Cálo (a) Facundo Quiroga (a) El Turco (26), mantuvo una entrevista reservada
con su excelencia, el señor ex gobernador francmasón-justicialista
de la vecina provincia de Catamarca, Dr. Dn. Vicente Leónides Saadi (a) La
Chancha Negra (43).
En ese contexto, la chancha negra le informó a el
turco varias cosas. La primera era que la resistencia peronista no era
solo obreros y sindicalistas unidos y organizados para poner bombas, para
debilitar al gobierno militar de la revolución libertadora, sino que además, en
ella estaban involucrados miembros de las fuerzas armadas y de las fuerzas de
seguridad, y gente de La Side, que formaban parte de El Grupo de los Oficiales
Unidos (GOU), que era la rama nazi-indiana (léase: justicialista) de La
Hermandad de El Gran Oriente Federal Argentino (GOFA), que es la rama
vernácula de la francmasonería universal (léase: la venerable hermandad
roja = la masonería colorada =
la masonería escocesa = la masonería francesa = la masonería franca = la franca
masonería = la francmasonería = la masonería católica = la masonería papista =
la masonería sagrada = la masonería divina = la divina providencia), que
brega por el éxito del plan divino de salvación.
La segunda era que La Hermandad del Gran Oriente
Alemán (léase: Odessa), que es la rama nazi de la francmasonería
universal, seguía liderada por Adolf Hitler, entonces residente en La Finca
Alta Vista, de La Estancia La Anita, del departamento santacruceño de Guer
Aike; en el marco de El Proyecto América Alemana, era la gran controlante
fáctica de las redes del narco tráfico de el opio mexicano, de la marihuana
paraguaya y de la cocaina boliviana, en la totalidad de América Latina,
incluyendo a La Argentina, obvio.
La tercera era que la decisión de Odessa era que esos
tres estupefacientes dejaran de ser un artículo de lujo de las clases altas, y
se convirtieran en una mercancía de consumo masivo, distribuída, comercializada
y exportada por organizaciones criminales de la región, en connivencia con las
fuerzas de seguridad nacionales, para generar ingentes capitales, necesarios
para financiar las operaciones políticas de instauración del gran reino alemán
de Teutonia, con capital fantasma en la villa de San Martín de los Andes, que sería
el gran dominio latinoamericano, a partir del cual sería construída la grandeza
mundial de El Cuarto Imperio Alemán (léase: Das IV Reich), que sería instaurado
en el siglo veintiuno (el siglo de la
era sinctotrónica). [3]
La cuarta era que, semejante designio nazi, exigía la
plena colaboración de La Argentina, pero gobernada por El General Perón,
que debía regresar a la patria cuanto antes, para evitar que nuestro país, y que
toda la región latinoamericana, cayeran en las garras del diablo de las dos
cabezas, que eran los EEUU y La Unión Soviética, o si se prefiere, del
capitalismo plutocrático o del comunismo ateo, claro estaba.
Y la quinta, era que los abogados peronistas,
debían asumir la defensa en sede judicial criminal y correccional de los presos
políticos de la resistencia peronista, como así también, de los agentes
secretos y de los aliados criminales tácticos de Odessa, involucrados en los casos
vinculados con el tráfico ilícito de estupefacientes, formando de ese modo,
nada más ni nada menos, que la narco barra de las aves negras del justicialismo,
que por supuesto, serían recompensados con creces, con información clasificada,
con dinero negro pero blanqueado, y con poder político, que es lo único que
garantiza la completa impunidad judicial, obvio.
El turco se lo quedó mirando a la chancha negra como
estupefacto, no sabiendo si estaba ante un loco de chaleco, o si estaba ante un
visionario del futuro, predestinado a ser un procer de la segunda mitad del
siglo veinte (el siglo de tecnología), o algo por el estilo.
Pero luego de pensarlo unos segundos, calculó que no
estaba nada mal embarcarse en una aventura política que lo podía llevar a volar
más alto de lo que jamás hubiera soñado ni en sus sueños más fantasiosos.
Al fin y al cabo, él no era más que el hijo de un
inmigrante sirio, que había logrado tener un hijo argentino y abogado, que
también debía cumplir su mandato familiar de librar la guerra por la
supervivencia, que obviamente, es a matar o morir, acá y en La China, y
nada más, claro estaba, y agarró viaje.
Semanas más tarde, el Lic. Menem fue iniciado en un
taller especulativo (léase: filosófico), dependiente de la francmasonería
universal colorada, adoptando el nombre
esotérico de Facundo Quiroga.
Desde entonces, y durante los siguiente dos años (1956-1958), el estudio jurídico del
Lic. Menem empezó a tener casos criminales, vinculados con el narcotráfico y
con la resistencia peronista (léase: el terrorismo), comenzando a ser
visualizado por los servicios de inteligencia de las fuerzas armadas, de las
fuerzas de seguridad y gubernamentales como un narco abogado de la
resistencia peronista, que gozaba de la impunidad que le daba la pertenencia esotérica, y nada más,
claro está.
Por eso, en 1959, el Lic. Menem (29), fue nombrado
asesor letrado de La Seccional La Rioja de La Conferación General del Trabajo
(CGT), y al año siguiente (1960), fue elegido para ocupar el cargo de
secretario general de la seccional riojana de La Juventud Peronista (JP).
Cinco años más tarde (1965), en el marco de las
elecciones internas partidarias, el Lic. Menem (34), resultó electo para ocupar
el cargo de secretario general de El Partido de la Unión Popular (PUP) de la
provincia de La Rioja, que era el nombre de El Peronismo Sin Perón de aquella
época.
Meses más tarde, el turco se incorporó al consejo
superior partidario a nivel nacional, liderado por el ex gobernador francmasón-peronista
de izquierda electo que no llegó a asumir, de la provincia de Buenos Aires, Agte.
SIE C-3 Cro. Dn. Andrés Framini (a) Armando Fleitas (a) El Negro (41),
comprándose un departamento de dos ambientes, en el barrio porteño de Boedo,
para utilizarlo durante sus viajes a la capital federal de La Argentina (Buenos
Aires). [4]
Y vino el quinto golpe de estado de la historia
argentina (1966), y la nación
comenzó a ser gobernada por El Teniente General Onganía, y se acabó todo,
porque bigote, declaró la suspensión sine die de las actividades gremiales,
estudiantiles y políticas, y así no se podía seguir.
Y si me dijeran que estoy muy equivocado,
respondería que veremos, veremos y pronto lo sabremos.
[1] La libre expresión y la segura circulación de la información contenida en
el presente documento se halla jurídicamente garantizada por la Declaración
Universal de los Derechos Humanos de 1948 (Art. 19), la Constitución Nacional
de la República Argentina de 1995 (Art. 14),
la Ley Nacional N° 26.032 de 2005 y el Código Penal de la Nación (Arts.
153 y 155).
[2]
Para uno de Los
Siete Grandes Sabios de Grecia (Solón) El
Cisne Negro es un hecho teóricamente posible que todos creen que es
prácticamente improbable, pues si ocurriera sería castastrófico.
[3] La novena revolución tecnológica,
también conocida como la novena revelación, o bien, como la era
sinctotrónica, está basada en la alta tecnología militar de los túneles de
viento (léase: los aceleradores de partículas subatómicas), como el que
funciona desde 2006 en Suiza, que está tratando de aislar la partícula
veinticinco (P-25), que es la que se cree que sería la provocadora de la gran
explosión (léase: the big bang), ocurrida en el instante cero del universo (la
creación). A partir de los conocimientos obtenidos como consecuencia del
desarrollo de los experimentos llevados a cabo en los grandes aceleradores de
partículas, los tecnólogos militares de las grandes potencias buscan la forma
de viajar en el tiempo, acortando la duración de los viajes espaciales,
uniendo nuestro planeta con otros muy distantes, pero habitables, en unos pocos
años, meses, días o incluso horas, minutos o segundos, iniciando así el proceso
de la conquista, de la colonización, de la evangelilzación y de la institucionalización
de la vía láctea (léase: la redención terrícola). Conste.
[4] SIE es la inicial de la servicio de
inteligencia del ejército y C-3 es el escalafón de revista de los agentes
secretos de casi todos los servicios de inteligencia del mundo entero. Conste.
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