El Diario Digital de la Historia y de la Geopolítica
Domingo 13 de Octubre de 2.013.
El Relato VII
Por Rubén Vicente
El lunes treinta
de abril de 1973, se reunió la asamblea de accionistas de la firma Papel Prensa
SA de Buenos Aires. En ese contexto, las empresas privadas editoras de los
diarios La Nación (12%) y La Razón (12%), transfirieron sus acciones a favor de
los Dres. Luis Alberto Rey y Rafael Ianover, en representación del
empresario David Graiver (a) Dudi (32), cuya foto ilustra este artículo.
Desde
entonces, Papel Prensa era del estado nacional (51%), de Clarín (25%) y de
David Graiver (24%). En otras palabras, en los hechos (in fact), a través de
sus respectivos testaferros, la porción accionaria privada de Papel Prensa
(49%), quedaba bajo el control de Perón y de Firmenich, es decir, de la derecha
nazi del justicialismo (léase: el peronismo) y la izquierda stalinista
del justicialismo (léase: los montoneros). Right?
Como nuevo
presidente del directorio fue nombrado el Dr. Graiver. Un mes más tarde, su
excelencia, el señor presidente masón-justicialista
de la nación, Lic. Dn. Héctor Jacinto Cámpora (a) El Tío (64), presidió la
ceremonia de iniciación de la obra de construcción de la planta productora de
pasta base de celulosa y de papel de diarios y de revistas de la firma Papel
Prensa SA.
Desde
entonces, el gran diario argentino (Clarín), comenzó a contratar a jóvenes dibujantes
caricaturistas, para empezar a publicar las historietas de los personajes que
comenzarían a hacer de las delicias del público, como por ejemplo, Clemente, El
Loco Chavez, Diógenes y El Linyera, El Mago Fafá, La Crónica Diaria, El Negro Blanco, El Nene
Montanaro, Matías, La Nelly, etc.
Durante el año
1974, el gran diario argentino (Clarín), se empezó a enfocar en los
deportes, en los espectáculos, en la economía y en la política internacional,
comenzando a publicar suplementos vinculados con esas temáticas, que reducían
la importancia del tratamiento de la política nacional, donde la línea
editorial podía ser válidamente caracterizada como austera y distante
(sic).
Al año
siguiente (1975), la Bach. Guadalupe Noble Zapata (a) Lupita
(22), se graduó como licenciada en derecho, con diploma expedido por la
Universidad de Hardvard (Condado de Cambridge – Estado de Massachussets).
Tres meses más tarde, la Lic. Noble comenzó
a estudiar ciencias políticas, en la referida casa estadounidense de altos
estudios. Paralelamente, la Lic. Noble se afilió a El Partido Nacional
Republicano (PNR), liderado por el presidente francmasón
de los EEUU, Dr. Gerald Ford (62).
En los primeros dos meses del año 1976, la mitad de los editoriales
publicados por el gran diario argentino (Clarín), se refirieron a la
economía (50%), y los restantes se ocuparon alternativamente del poder
judicial, del desempeño del sindicalismo, de la situación del periodismo frente
a la violencia, y del rol de la oposición (50%).
Los
editoriales de esa época seguían la línea de atribuir el fracaso del sistema
económico a los problemas que se registraban en las otras esferas.
El golpe de
estado del jueves veinticuatro de marzo, no fue
presentado como la ruptura del orden constitucional, sino más bien, como el
resultado inevitable del desgaste del gobierno peronista (sic).
Sin embargo, a
diferencia del discurso editorial de otros diarios, Clarin no
adoptó una estrategia comunicacional sistemática, con el propósito de
socavar los cimientos del gobierno constitucional, sino que esgrimió una
crítica al desempeño del poder ejecutivo, que se podría calificar como mesurada
(sic).
En el
editorial del veinticinco de marzo, decía:
“Se
abre ahora una nueva etapa, con renacidas esperanzas. Y, si bien el cuadro que
ofrece ahora el país es crítico, no hay que olvidarse que todas las naciones
tienen sus horas difíciles, y que el temple de sus hijos es capaz de
levantarlas de su ruinosa caída” (sic).
Y ojo, que ese
día, el presidente de Papel Prensa seguía siendo Graiver. ¿Cómo?
Y si me
dijeran que estoy muy equivocado, respondería que veremos, veremos y pronto lo
sabremos.
[1]
La libre
expresión y la segura circulación de la información contenida en el presente
documento se halla jurídicamente garantizada por la Declaración Universal de
los Derechos Humanos de 1948 (Art. 19), la Constitución Nacional de la
República Argentina de 1995 (Art. 14),
la Ley Nacional N° 26.032 de 2005 y el Código Penal de la Nación (Arts.
153 y 155).
[2]
Para uno de Los
Siete Grandes Sabios de Grecia (Solón) El
Cisne Negro es un hecho teóricamente posible que todos creen que es
prácticamente improbable, pues si ocurriera sería castastrófico.
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