El Diario Digital de la Historia y de la Geopolítica
Lunes 16 de 2.012.
Única Foto de Su Face
Berrumavi
Es Como La Eternidad
Por Rubén Vicente
Yo
sé que a ella no le disgustaría la idea de que cuando se muera sus cenizas sean
esparcidas en el mar, porque es allí a donde pertenece su alma. Y ella sabe que
a mi no me desagradaría que después de que me llegue la hora, las mías sean
lanzadas al viento que silva en los bosques de los lagos del sur, porque es
allí a donde mi ánima siente que está su lugar.
El
día y la noche viven en lados opuestos del planeta, pero hay dos momentos en
que se unen, y es en el amanecer y en el atardecer, que son verdaderos
instantes mágicos, que afortunadamente, se repetirán una y otra vez, por los
siglos de los siglos.
Es
mucha la distancia que media entre el Atlántico y los Andes, pero sepan todos
que la geología los tuvo muy unidos hace tiempo, y sabe Dios porque los separó,
pero siguen formando parte del mismo mundo, y eso no tiene vuelta atrás.
Betina
Martelli y Rubén Vicente se aman muy profundamente,
con ese amor universal, que sólo se siente por el prójimo más próximo, cuando se
vive en la fe cristiana, que ilumina la vida de todos. Be de Betina, Ru de Rubén, Ma de Martelli y Vi de
Vicente, forman una sigla espiritualmente indivisible, es decir, Berrumavi.
Más
que preguntarnos por qué nos divorciamos, más nos valdría interrogarnos cómo se
obró el milagro de que el agua y el aceite hayan permanecido en mezcla casi perfecta
durante veinte años que fueron, son y serán ciertamente inolvidables.
No
es de eso de lo que quiero hablar, porque los misterios son asuntos del cielo,
que no pueden ser develados por la razón o el corazón humanos, y ya habrá
tiempo cuando ambos estemos ante el creador, para ser juzgados por nuestros
sentimientos, intenciones y acciones, para enterarnos de la verdad, pero de
toda la verdad y de nada más que de la verdad.
Por
ahora, yo sólo siento ganas de decir que Betina es una de las dos más grandes
bendiciones que Dios dijo que me merezco tener.
Puede
que quienes creen que la conocen no se hayan percatado, pero yo digo y sostengo
que Betina es un ser con alma de santa, porque son contadas con los dedos de
una mano, las personas que tienen una bondad sin límites como la de ella.
Hija
y hermana fántica de su familia, esposa ejemplar y segunda madre de unos
sobrinos a los que adora como si fueran sus propios crios. Estudiante de
inteligencia extraordinaria, aunque los libros no sean su pasión, porque la
práctica es su credo y la acción es su ley. Profesional del derecho criteriosa,
eficiente y responsable, que hace de la confianza bien entendida un culto que
la encumbra cada día más ante sus jefes, compañeros y subordinados.
Amiga
leal hasta la muerte como pocas, que jamás dejará a nadie en la estacada,
prodigándose en esfuerzos que van mucho más allá de sus posibilidades. Un alma
profundamente caritativa, que siente el dolor de los que nada tienen y todo lo
necesitan, aunque ni les haya visto la cara ni se las vaya a ver jamás.
Espíritu
devotamente creyente, que con una sonrisa en los labios, sabe ocultar el dolor de la cruz que significa vivir. Mansa
como una paloma, pero astuta como una serpiente para librarse de sus enemigos,
engrupiéndolos con distinción. Y un carácter alegre y positivo, que hace que
quienes la rodean, sepan que no todo está perdido, nada más que porque saben
que hay gente de su talante.
Payasita
inefable en la convivencia cotidiana. Organizadora exquisita de todo cuanto se
necesite preparar, sobre todo de las compras, de los viajes, de los sorteos, de
las fiestas y de las sorpresas, que son sus deportes predilectos, porque el
trabajo abnegado y la sana diversión son su merengue y su salsa, claro está.
Recta
en sus miras, derecha en sus fines, transparente en sus intenciones y generosa
en sus bienes. Y unos ojazos verdes que con mirada pristina, que son muy
capaces de derretir hasta los témpanos más polares.
Me
llega hasta lo más hondo del corazón, y por todo eso, y por mucho más, es que
siento que es un honor inmenso el saber que me considera su hermano en Cristo y
su amigo del alma, porque yo sé muy bien que Berrumavi Es Como la Eternidad,
porque es para siempre.
Y
por todo eso, justamente hoy, en que estoy a cuatro días de rehacer mi vida
junto a la mujer que amo en cuerpo y alma (Ema Dobrinsky – Aries – 41), es que
siento ganas de decirle a la otra accionista de Berrumavi SA:
¡Nunca
dejes de ser como sos Gordi Queridísima!
Y
si me dijeran que estoy muy equivocado, respondería que veremos, veremos y pronto lo
sabremos.
[1]
La libre expresión y la segura circulación de
la información contenida en el presente documento se halla jurídicamente
garantizada por la Declaración Universal de los Derechos Humanos de 1948 (Art.
19), la Constitución Nacional de la República Argentina de 1995 (Art. 14), la Ley Nacional N° 26.032 de 2005 y el Código
Penal de la Nación (Arts. 153 y 155).
[2]
Para uno de Los
Siete Grandes Sabios de Grecia (Solón) El
Cisne Negro es la alegoría de un hechoque es teóricamente posible, pero que
todos creen que es prácticamente improbable, pues si ocurriera sería
castastrófico.